A la hora de amueblar nuestro hogar, cada estancia debe tener lo necesario de acuerdo a su finalidad y a nuestra personalidad. Por ejemplo, en el caso de los dormitorios, el espacio debe invitar al descanso y además de reflejar la forma de ser de quienes lo habitan. Esto puede ser muy fácil cuando se trata de cuartos infantiles, pero en el caso de las habitaciones de pareja la situación puede tornarse complicada.
Por eso, acá te dejamos algunas ideas para que equipes de manera sencilla el dormitorio que compartes con tu pareja:
El colchón. El lecho es el lugar de mayor importancia dentro de una habitación, entre otras cosas porque de él depende el buen descanso de ambos. Pueden optar por un colchón de látex, que se amolda mucho mejor al cuerpo y en el que se distribuye el peso de ambos de forma uniforme, sin que los movimientos de uno molesten en exceso al otro.
El armario. La necesidad de espacios de almacenamiento puede variar de persona a persona. Por lo tanto, es vital armarse de paciencia y planificar juntos la distribución del espacio que se tenga disponible. Aquí el otro problema nacerá por la diferencia entre el concepto de orden que manejen ambos y para solventarlo se debe tener una buena comunicación y una buena dinámica de pareja.
Accesorios románticos. Puedes decorar con velas o flores, lo importante es que ambos se sientan seducidos por la estética del espacio. También resulta conveniente colocar algunas fotos de días especiales que hayan pasado juntos.
Iluminación. Conviene ser flexible en este aspecto, sobre todo si a alguno le gusta quedarse leyendo hasta tarde. Para estos casos particulares se puede adquirir una lámpara de noche y adosarla a una mesa, de forma que perturbe lo menos posible el sueño de la pareja. En general la iluminación debe ser cálida y que invite a relajarse dentro de la habitación.